sábado, 29 de diciembre de 2007

Una cuesta de enero muy empinada

an imparable ha resultado, que el IPC se despedirá del presente ejercicio en tasas cercanas al 4 por ciento, el doble del objetivo que se había marcado el Ejecutivo. Los principales culpables de esa evolución han sido los alimentos básicos -según Ceacu, hacer la compra nos sale hoy un 20 por ciento más caro que hace un año- y la incidencia de la carestía del crudo en los combustibles. En el caso de los alimentos, la escalada de los cereales y el aumento de costes que ello ha supuesto para los productores (los piensos se han disparado) ha propiciado este año -el último dato disponible corresponde a noviembre- repuntes del 30 por ciento en la leche, del 14,1 en el pan, del 11,4 en el pollo y de más de un 7 por ciento en la fruta, hortalizas y legumbres. A principios de 2008, las nuevas amenazas para la cartera serán la carne y las conservas. Se espera que estas últimas estrenen el año con un alza de precios del 20 por ciento en relación con lo que costaban hace tan sólo un mes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

DIMELO AMI QUE NO VEAS Y NO LE SAQUES MAS FOTOS AL NIÑO POR EL ORDENADOR